La pota, conocida como luras en Galicia, o como jibia o choco en algunos países de Sudamérica, es un cefalópodo de parecido muy similar al del calamar. Sin embargo, a pesar de sus similitudes, estamos frente a dos alimentos distintos.
Continúa leyendo este artículo para descubrir cuáles son las principales diferencias, las especies de pota que podrías encontrar, y los beneficios de comprar nuestras sabrosas anillas de pota.
Pota vs. Calamar
La principal distinción: el precio
Uno de los principales factores que diferencia a la pota del calamar es su costo. El valor de la pota generalmente es mucho más bajo que el del calamar. Por consiguiente, este puede ser uno de los motivos por los cuales optar por la pota, aunque esto dependerá de qué preparación queramos realizar.
Ahora bien, si vas a comer afuera y pides calamar pero en su lugar te traen pota, estás perdiendo dinero. Para evitar esto o darte cuenta si esto llegara a suceder, te recomendamos tener en cuenta las siguientes características para diferenciar pota de calamar.
Sabor
En relación al sabor, el de la pota es más intenso, mientras que el del calamar es más suave y delicado. Esto no significa que el sabor de la pota sea desagradable, simplemente que es un poco más fuerte. Esto la hace ideal para acompañar guisados que demandan más tiempo de cocción, puesto que así se logra intensificar el sabor de la preparación. No obstante, si prefieres cocinar el molusco a la plancha, tal vez te convenga elegir el calamar para conseguir un sabor más sutil.
Tamaño de las aletas
A nivel visual, si nos fijamos en el tamaño de las aletas de ambos moluscos mientras están enteros y crudos, es posible diferenciar con facilidad una pota de un calamar. En la pota las aletas son pequeñas y tienen una forma como de corazón. Por otro lado, en el calamar las aletas son más grandes, además estas tienen una forma romboide que abarca casi la mitad del calamar.
De forma adicional, otra diferencia visual que podemos encontrar tiene que ver con el color. En la pota se puede ver una coloración violeta, y en el calamar la tonalidad es casi transparente, pero podría cambiar de acuerdo al área de donde provenga.
Valor nutricional
En cuanto al aporte de nutrientes, estos dos moluscos son muy parecidos. Su contenido de proteínas, vitaminas y minerales prácticamente no presenta diferencias. Además, ambas opciones ofrecen un bajo nivel de grasas.
Tipos de pota
- Pota Europea, Todarodes sagittatus: presenta una tonalidad rosa pálida, con pequeñas motas de color violeta, o bien azules y rojas. Gracias a ellas este animal puede pasar desapercibido en el océano. Por lo general, mide alrededor de 25 cm y resulta fácil de hallar en el mar Mediterráneo. En cambio, las luras que se encuentran en el Océano Atlántico tienen una mayor longitud, pudiendo alcanzar los 75 cm. Del mismo modo que sucede con los calamares, si una pota se siente amenazada por otra especie, libera una tinta oscura amarronada.
- Pota Argentina, Illex argentinus: esta es otra variedad de pota que se puede encontrar habitualmente en el mercado. Mide alrededor de 40 cm de largo y su coloración es roja violácea.
- Pota Costera, Todaropsis eblanae: esta variedad de pota es la que más se asemeja en su apariencia al calamar. Por este motivo, muchos restaurantes ofrecen esta pota y la venden como si fuera calamar.
¿Por qué comprar anillas de pota?
En Pescados y Congelados Guerrero nos encantan las anillas de pota. Sin dudas son un producto muy apreciado en la cocina mediterránea. Por esta razón, te brindamos las más ricas anillas de pota listas para freír, para que puedas disfrutarlas en casa como un auténtico chef.
Características que distinguen a nuestras sabrosas anillas de pota:
- Preparación simple: no pierdas tiempo en la cocina ensuciando utensilios y herramientas para elaborar una receta. Como nuestras anillas de pota se encuentran pre-hechas, solamente las necesitas poner a freír y buscar un acompañamiento. Vale la pena aclarar que para cocinarlas no necesitas descongelarlas.
- Corteza apetitosa y crocante: al elaborar nuestras anillas de pota, las mismas son sometidas a un rebozado fino y crujiente. Esto las convierte en un bocado irresistible, perfecto para disfrutar en cualquier ocasión.
- Tan sólo 2-3 minutos de cocción: si has regresado del trabajo y estás cansado para cocinar algo muy elaborado, o si tal vez debes salir y estás con prisas, tener un stock de potas congeladas es una excelente opción. Para freírlas simplemente necesitas calentar el aceite y dejarlas por unos 3 minutos. Como resultado, obtendrás un producto tierno por dentro y crujiente por fuera en muy poco tiempo.
Para terminar, si también quieres probar la diferencia entre pota y calamar, te sugerimos comprar anillas de ambos productos. La diferencia es sutil, pero podrás apreciarla mejor si los pruebas uno al lado del otro, y así sabrás cuál se adapta más a tu paladar. ¡Haciendo clic aquí podrás encontrar ambos productos a una calidad inigualable!
